Hoy presentamos una entrevista doble. Estefanía Pérez es la vicepresidenta del Club de Skate de Alhaurín de la Torre, y Antonio Pérez, casualidad o no, es su hermano, un skater que, con solo 16 años, ya atesora un buen palmarés. La llegada de Estefanía al Club supuso sin duda un antes y un después. Su madurez y su implicación personal son la combinación que ha hecho posible que los skater de Alhaurín estén organizados y pudiesen arreglar su pista, por ejemplo. Aprovechando que ha venido con su hermano, Antoñito, le cuelo alguna pregunta de cuando en cuando.
Alhaurín Es Deporte: ¿Cuáles son tus funciones para con el club de skate?
Estefanía Pérez: Yo soy secretaria. Mis funciones son totalmente administrativas. Es decir, todo lo que sea hablar con el ayuntamiento, o todo lo que es el movimiento de papeleo en general es lo que llevo yo. También la organización de competiciones.
AED: ¿El club que ofrece exactamente a sus miembros?
E.P: Ahora mismo, estamos parados como escuela y demás. Porque el club, realmente, no tiene ningún tipo de ánimo de lucro. Entonces, para crear ciertas cosas, necesitamos más apoyo del Ayuntamiento, del área de deportes. Ahora mismo, como club hacia el socio está parado. El club, lo que se dedica es a mantener el skatepark, a ver los fallos que tiene y lo que reclaman los skaters. Y a realizar las competiciones.
AED: Sois como un enlace entre los patinadores y las instituciones…
E.P: Exactamente. Para que el deporte esté activo. Lo que aún no tenemos, que nos gustaría a largo plazo, es tener una escuela.
AED: ¿Cuántos sois? O ¿Cuántos van habitualmente a la pista de skate?
E.P: La verdad es que hay mucha afición en Alhaurín. Si te fijas, la pista de skate siempre está llena. Es cierto que hay gente que no respeta que es una pista de skate, y no un parque infantil, pero sí que la pista de skate está llena constantemente.
AED: Antonio ¿Qué es lo que más te gusta de patinar?
Antonio Pérez: Pues aprender un truco nuevo. Y patinar con los colegas, la verdad.
AED: Y de los trucos ¿Cuál te gusta más?
A.P: Para mí, lo mejor que hay es ‘grindar’ en una barandilla.
AED: Y de los módulos de la cancha de skate ¿Cuáles te gustan más?
A.P: La barandilla y los cajones.
AED: Estefanía, no sé si has pensado alguna vez en ello ¿Qué valores crees que puede aportar el skate a los jóvenes?
A.P: Pues… tenemos una visión bastante fea del skate. Siempre se ha considerado como algo cultural donde vemos al skater como el típico tiradillo de calle. Pero se ha convertido en una modalidad deportiva y los valores que se les enseñan a los niños son iguales que en cualquier tipo de deporte: la constancia, la perseverancia, intentar todos los días mejorar… porque ya se ha vuelto olímpico. Entonces, la gente se puede formar una carrera deportiva a través del skate. Y aparte, yo, personalmente, creo que tiene muchas ventajas psicomotrices para los niños pequeños. Es decir, el montarte en un patín hace que muevas motrizmente todo el cuerpo, que trabajes mucho el equilibrio. Para los niños pequeños, aunque parezca un deporte peligroso, se puede utilizar el skate de otra manera. Les enseña, sobre todo, equilibrio, que, en esa edad, entre 6 y 7 años, todavía lo están desarrollando.
AED: ¿Convertir habitualmente la calle es vuestro patio de juegos, hace sentir más cómodos a los chicos en el entorno, que si pasaran más tiempo en casa? ¿Sentís la calle como algo más vuestro de estar tanto tiempo ahí?
A.P: Hombre, mientras estén en la calle, se están relacionando, están socializando con los compañeros, están haciendo deporte, no están en casa sentados viendo la tele o jugando… Yo creo que el skate hace que se relacionen y, en ciertas edades, es muy importante que ellos socialicen mediante un deporte. Que no se digan vámonos al parque a sentarnos, sino que van a ir a hacer skate.
AED: Antonio ¿Cómo es tu relación con la calle?
A.P: No lo sé, yo es que siempre he estado ahí metido.
AED: Claro, no puedes comparar. Es tu propia vida…
A.P: Para mí, el skatepark es mi segunda casa.
E.P: Yo, a él no lo he visto decir “me voy al parque”. Cómo, me voy al parque a sentarme a comer pipas. Se van al skatepark y se comen las pipas allí, pero mientras, están haciendo trucos, otros están apoyándoles… Cuando se graban, se ve cómo uno hace un truco que lleva mucho tiempo intentando hacer y los demás lo celebran. Se lo pasa muy bien, la verdad. Es que, antiguamente parecía una cosa un poco insana, pero ahora se está volviendo un deporte super sano y ves a chavales super sanos y super concienciados en que es un deporte.
AED: ¿Cómo es Alhaurín para recorrerla en skate? ¿Se puede?
A.P: En suelo es una porquería, las cosas como son. Pero hay algunas plazas que, como spot, están bomba, están guay.
AED: ¿Cuál es tu preferida, por ejemplo?
A.P: Plaza España. Lo que pasa es que ahora le ponen bancos para que no la patinemos (risas). Que es normal, que yo lo entiendo, porque tampoco vamos a joder la plaza, pero que eso es el patín. El patín siempre ha sido calle.
E.P: Es difícil de controlar. Es muy difícil de controlar porque el skate tiene una modalidad, que es calle. Entonces ellos, por ejemplo, cuando van en coche, ven un sitio y dicen “¡Uauh!¡Mira que spot!”. O sea, es que ellos van maquinando conforme van viendo una escalera, un bordillo… Es muy difícil que el skater no haga skate en la calle. No se debe hacer (se apresura a aclarar). No se debe dañar el mobiliario urbano. No se debe.
AED: Aquí hay un poco de conflicto ¿No? Como con el graffiti. Ven un sitio fantástico y les dicen “no pintes ahí”, y es justo el mejor sitio para pintar…
E.P: Claro, lo que pasa es que es cierto que los bordillos y las barandillas, los rompen y no está bien. No deberían.
AED: Hay cierta adaptación a la sociedad.
E.P: Sí. Y aparte, te pueden multar perfectamente porque estás dañando el mobiliario urbano.
AED: ¿Cómo es vuestro calendario de competiciones? ¿Tenéis competiciones fijas? ¿Por dónde os movéis?
E.P: Nosotros, como club, tenemos una competición al año, el ‘Battle of Lauro’, que esta va a ser la tercera edición que se va a hacer, en octubre. Y, a lo largo de todo el año, hay competiciones a nivel andaluz. Sobre todo, nosotros nos movemos en el andaluz. Este año, con el patrocinio del ayuntamiento, sí que Antonio va a intentar moverse en el territorio nacional, con competiciones grandes como puede ser el ‘O Marisquiño’ que es la más conocida en España. Yo, en este caso, soy la que los lleva, los trae… que si tenemos que ir a Sevilla, a Granada… Los voy moviendo. Y habrá unas 7 u 8 competiciones en Andalucía a lo largo del año.
AED: Las competiciones, el beneficio que os da, aparte del económico, es que le da reputación al club, la posibilidad de que se fijen en vosotros…
E.P: Claro. Al club también, pero sobre todo a los skaters locales. En este caso, Antonio, y en el otro caso ‘Inxao’, que es más mayor y es el presidente del club, los dos van sobre todo para intentar conseguir premios. Y, como hemos hablado de lo de las Olimpiadas, lo que van intentando es, en todas las competiciones, ir consiguiendo puntos para ver si se pueden ir metiendo e ir progresando, porque Antonio tiene 16. Él ha pasado ahora a la categoría adulta.
AED: Bueno, hablando de competiciones, en mayo de 2018 creo que fue la segunda edición del ‘Battle of Lauro’, y ahora, en octubre, me comentabas que llega el siguiente, la 3ª edición ¿Qué características tiene esta competición en concreto?
E.P: Esta competición, el primer año que la hicimos tuvo una afluencia… la mayor prácticamente de Andalucía, o de toda la parte de Madrid hacia abajo. Hubo casi 90 participantes, que en una competición de skate son muchísimos. La verdad, es que se nos apretó mucho el timing y tuvimos problemas porque no pensamos que iba a tener tanta afluencia. El segundo año igual. Un montón de afluencia. Damos un premio muy jugoso, que son 1000€ al que gana, que es dinero. El segundo año, ya empezamos con la categoría femenina también, que no la habíamos metido el año anterior. Y se basa prácticamente en lo que tenemos en este skatepark, que es una competición de Street.
AED: ‘Street’, para que la gente lo entienda ¿En qué se diferencia con pista?
E.P: Pues mira, para decirlo vulgarmente, el ‘Street’ son los módulos que veis por el suelo y la otra modalidad, el Bowl, es como una piscina vacía grande que va en el suelo. Nosotros ahí no tenemos opción. Lo hemos pedido al ayuntamiento. Lo que le falta a Alhaurín es un Bowl. Porque nosotros, igual que hacemos una competición, queremos que el ‘Battle of Lauro’ entre en las competiciones del comité andaluz de skate. O sea, queremos que nuestra competición sea la que represente en Málaga a todos los skaters. Es muy importante que llevemos esta carrera ya con las competiciones que hemos hecho, porque también hay otros municipios ahí que también han hecho un buen skatepark y hacen buenas competiciones.
AED: ¿Qué significa para vuestro club acoger un evento como este, aquí en Alhaurín, en vuestra casa?
E.P: Es super importante. Sobre todo, porque ellos también se lucen un montón. Están en casa, disfrutan muchísimo. Cuando van a otro skatepark, tienen la tensión de que es nuevo, pero aquí se lo pasan muy bien, y disfruta muchísimo la gente que viene a verlos. La verdad es que siempre hemos tenido mucha afluencia de público y a la gente le gusta.
AED: Apuntabas antes que estáis luchando por un puesto en el Circuito Andaluz de skate ¿Qué es lo que necesitáis para conseguirlo?
E.P: Una buena competición (risas). En octubre, un buen ‘Battle of Lauro’. Tanto o más que el anterior. Depende de nosotros que tenga mayor afluencia. Pero estamos ahí, luchando por la plaza, o sea, que necesitamos lo mismo que hemos hecho otras ediciones, pero mejor.
AED: ¿Buscáis lugares nuevos para ir a patinar? ¿Hacéis visitas a las pistas de otros municipios?
A.P: A ver, yo siempre estoy metido en este agujero y ahora estoy buscando irme a otros sitios. Ahora me voy yo solo a Málaga porque ya no hay mucha gente que patine aquí, porque ya se han hecho mayores o porque no sé…
AED: ¿Es más guay patinar cuando estás con gente que cuando estás solo?
A.P: Ahí está. Yo ahora, básicamente, patino solo. Yo no patino con nadie y por eso me voy a Málaga solo a patinar. Me voy a un skatepark que conozco allí, que tengo colegas.
AED: Y cuando vais a otro sitio y veis otras pistas ¿Echáis en falta algo en vuestra cancha de skate? Algo que penséis “esto está guay y no lo tenemos nosotros”.
A.P: Pues si te lo digo… es que cambiaría el skatepark entero, vamos. Yo lo ponía entero nuevo.
AED: Después de un tiempo, os cansaréis de ver siempre la misma pista… querréis también un poco de variedad… los módulos fijos tienen esa condición.
A.P: Es que hubo un problema. Es que teníamos un skatepark de madera que, la verdad es que ya tenía mucho tiempo y se hizo polvo, y nos dijeron que iban a hacer otro diferente, que teníamos planes y todo. Y por la cara, me hicieron la réplica, pero en cemento. Entonces… es que es lo mismo. No sé, yo llevo 11 años metido en el mismo sitio.
AED: ¿Qué diferencia hay entre rodar encima de cemento y rodar encima de madera? Para los que no entendemos del tema.
A.P: Simplemente que, en cemento, no suena al caer de un truco y en la madera sí.
E.P: Es que en el skatepark también hay bikers, con las bicis. Entonces, la madera se rompe, y es mucho más cara de mantener. Yo no lo sé, pero tengo entendido que patinar en madera es mejor, pero que a la hora de tener un skatepark al aire libre y demás, es más delicado y se rompe más fácil con las bicis. El skatepark ya tenía boquetes. Nosotros realmente montamos el club porque el skatepark estaba inservible. Me dije: “montamos un club y hacemos presión” porque esta gente se plantaba en el ayuntamiento delante del alcalde para decir “¡Oye, arréglame el skatepark!” y dije “No, vamos a hacerlo bien. Vamos a montar un club, vamos a mandar un escrito y vamos a hacerlo bien”. Entonces, a partir de ahí, ya nos pusimos en contacto, en su tiempo, con Pruden, y ya ha ido todo bastante bien. El ayuntamiento siempre ha colaborado. Lo que pasa, es que es cierto que el que construyó el skatepark lo hizo de bulla y clonó todos los módulos. Hizo nuevos, pero clonando los antiguos. Entonces, nos llevamos un poco de decepción. Que nos han dicho que van a hacer uno nuevo. Y que el nuevo, lo van a hacer siempre teniéndoles en cuenta a ellos. Esperemos que realmente sea así, porque son ellos los que lo patinan. Es que es una lástima. O sea, no es que sea más barato o más caro, es que es una lástima que ellos que lo patinan, no puedan decir “Pues oye, esto sí me gusta, esto no me gusta, esto hace falta, esto no…” porque al final yo, como le decía a Pruden “Yo no entiendo. Tú tampoco. Pero ellos sí”. Lo que, a lo mejor, no van a entender son de grados en una curvatura, pero ellos saben que, si hace aquí esto, y aquí esto, y esto va para allá (dibuja un recorrido con el dedo), es una línea. O sea, el skatepark, al final, es una línea.
AED: Apuntabas antes la relación con los bikers ¿Qué tal la relación cuando coincidís? ¿Estáis bien organizaditos?
E.P: Pues muy bien. Sí, no hay ningún tipo de problema, al revés. Cuando hemos querido hacer presión, hemos contado con ellos. Hay muy buen rollo. Ellos se respetan.
A.P: Vamos, si es que somos colegas. Si quedamos para salir todos.
E.P: Ya te digo, lo llevan como un deporte. Van todos a hacerlo y se respetan bastante. No ha habido nunca ningún problema. El problema está en lo que hemos dicho antes, que el skatepark no es un parque infantil. Ahí está el gran problema. Porque un niño que mide un metro y pico, que va con una velocidad determinada, si hay un niño de 4 o 5 años, aunque esté con un patín, con cascos, con rodilleras… se la lleva por delante y le mete un zambombazo que puede mandarla 2 o 3 metros para allá. La gente no entiende que están practicando un deporte. Eso es como si tú te metes en una cancha de fútbol cuando están jugando al fútbol. No se te ocurriría. Pues esto es igual, pero parece que la gente no…
A.P: Pero no es lo mismo que si se mete con un skate a practicar o con una bicicleta, que si se mete con uno de estos juguetes. Ese es el problema. Si dijese, es que va a montar en bicicleta, pero bien. Yo creo que hasta le enseñaríamos.
E.P: Le enseñarían porque él empezó igual. Un día se cogió el patín del Colacao y dijo “Bueno, pues voy a tirarme por el skatepark”. Y desde el minuto uno, lo han ayudado todos los compañeros que están allí, desde que tiene 5 años. Él tiene colegas desde que tiene 5 años. Él tiene 16 y sigue con los mismos colegas del skatepark. Siempre han sido los mismos, los he visto de crecer a todos (risas)
AED: También hay un grupo de workout. Sois como una pequeña pandilla de deportes urbanos…
E.P: Exactamente, sí. Sí, son una pandilla de deportes urbanos, tú lo has dicho. Antes eran más urbanos, ahora ya tienen sus zonas, pero sí, se juntan todos. Son cosas de chicos, creo.
AED: En una entrevista reciente, hablabais de la idea de montar una escuela de skate para dar también una salida profesional a los chicos que la practican ¿Cómo va eso?
E.P: Eso está parado. Está parado porque reclamamos al ayuntamiento que hiciera cursos de monitores deportivos, de estos que da la Junta que son por horas, simple, para intentar que los chavales se formen. Porque el problema está en que hay muchos, muchos chavales, que han abandonado los estudios y a mí me da pena que, siendo buenos skater, si no les gusta estudiar, podrían formarse por otras ramas y que el Ayuntamiento no ponga ese tipo de medios. Porque yo creo que, si hacen este tipo de curso, ellos mismos pueden dar clases de skate, se pueden intentar especializar por alguna rama de ahí. Hay algunos que están trabajando en cosas que a lo mejor no aprovechan su potencial y abandonan el deporte. Eso no es algo muy costoso, y el ayuntamiento debería hacerlo porque, mandarlos a Málaga que hagan un curso… a lo mejor hay chavales con 17 años que no tienen ni el carnet (de conducir). No lo van a hacer. Pero si están aquí, y les ocupa 3 o 4 horas a la semana, seguramente sí lo hagan.
AED: Si esto siguiese para adelante ¿Qué salidas profesionales puede tener un skater?
E.P: Si esto sigue para adelante, puede tener un montón de salidas profesionales. Hablamos de técnico de skate, hablamos de profesores de skate… hablamos del skate como un deporte olímpico. Si lo vemos como otros deportes, como el fútbol… en fútbol, por ejemplo, hay técnicos, masajistas… y todos especializados en el fútbol. Entonces, el skate se va a convertir en un deporte olímpico, y va a tener un montón de salidas.
AED: Esa era justo la siguiente pregunta. El skate ha sido recientemente reconocido como deporte olímpico. Se estrena en Tokio en 2020 ¿Cómo beneficia al deporte? Ya me has ido adelantando alguna pista.
Claro, beneficia al skate porque nos convertimos en deporte. Hemos pasado de ser skaters, a ser deportistas. Entonces, claro que nos va a beneficiar. Hay gente que no quiere porque considera el skate una cultura. No un deporte, sino una cultura. Yo lo veo súper bien, porque creo que, es cultura, pero creo que deben de formarse los chavales.
AED: El kárate era una cultura milenaria y…
E.P: Exactamente, y lo hicieron olímpico. Bueno, ahora lo han quitado (risas). Le queda un par de años, también te digo. Pero sí que es cierto que, chavales cómo él, con 16 años ahora, probablemente si pillen la especialización y pillen ser de los primeros. De los pioneros en especializarse en esta rama. De todas maneras, en América, en Estados Unidos, el skate es pff… Aquí es un churro, pero en Estados Unidos la mayor competición ¿Qué dinero pueden ganar? 500.000 $.
AED: Supongo que los patrocinios son mucho más fuertes allí…
E.P: Patrocinios y competiciones.
A.P: Lo que hay en Barcelona se puede comparar con lo que hay en un pueblecito. Entonces, no tiene nada que ver el nivel que salte una persona que patina en ese skatepark, que va todos los días 6 horas, que uno que patine aquí también 6 horas. Es que no va a salir con el mismo nivel.
E.P: Hombre, es que es la cuna, entonces… allí un skater, vive del skate. Aquí, un skater no puede vivir del skate, ahora mismo, jamás. Antiguamente sí. Los sponsors daban dinero. Pero ahora no. Ahora ya, ese grifo se corta hace un par de años, cuando empieza Nike a meterse en el skatepark. Ahí empiezan a cerrar todas las pequeñas tiendas, las pequeñas marcas y los sponsors. Ahora los sponsors son, o Nike, o marcas grandes, como Converse. Marcas muy, muy grandes. Pero las pequeñas, que eran las que realmente llevaban el patrocinio de esta gente, esas marcas mueren. Llega una empresa como Nike y se los come a todos.
TEST DEL DEPORTISTA:
Tu segundo deporte preferido es…
E.P: El fitness. A mí es que me encanta el deporte en sí. Yo estoy sufriendo porque no he ido esta mañana. No lo practico más por miedo a lesionarme y tener trabajo y demás.
A.P: Surfear. También lo que tiene que ver con la naturaleza. Senderismo, espeleología… todo eso.
Yo, Estefanía Pérez, me arrepiento de… no haber empezado antes a meterle mano al skate. De llevar solo 3 o 4 años. Me arrepiento de no haber empezado en el momento en el que se montó en el patín. Y me arrepiento de no haber empezado desde el principio en este pueblo con el skate.
El libro que siempre tienes a mano: (E.P) El último libro que me leí fue uno de Dan Brown, ‘Inferno’.
Lo mejor de Alhaurín de la Torre si de deporte hablamos: (E.P) Alhaurín es genial en el deporte. Aparte del skate, ha dado opción a todas las ramas deportivas y para mí, Alhaurín de la Torre, es un 10 en temas de deporte. Independientemente de que nosotros pidamos, o dejemos de pedir, creo que todos los deportes, habidos y por haber, aunque fueran raros, todos han tenido su hueco. Todos, si hemos pedido, hemos tenido nuestra zona. Y, en mi caso, que corro y que voy andando todos los días, es fantástico, me hago la avenida todos los días.
El mejor deportista de Alhaurín de la Torre…
E.P: Hombre… Antoñito. Yo voy a decir mi hermano, está claro.
A.P: La leyenda del skate… (risas).
E.P: Inxao, el presidente del club. El fundador.
La ciudad más bonita que conoces, que no sea Alhaurín: (E.P) El Palmar. Para mí, Cádiz, Palmar, toda la zona de la Costa de la Luz… para mí, es fantástica. Si yo no viviera aquí, me iría al Palmar y me cogería una casita y estaríamos todo el día haciendo surf.
Tu ídolo deportivo:
E.P: Pues yo voy a decir un skater. A mí me gusta bastante Dani León. Me gusta bastante su personalidad, me gusta bastante su manera de patinar y, sobre todo, la mentalidad que tiene y que un skater de los pies a la cabeza. Y lo conoces y es un chaval extraordinario.
A.P: Para mí siempre ha sido el mejor Nyjah Huston.
E.P: Lo conoció en Barcelona y casi se muere. Es su ídolo de siempre.
Tu mayor virtud y mayor defecto:
A.P: Defecto, el tardar muchísimo en sacarme un truco nuevo. Me puedo tirar 6 horas, la tarde entera patinando, y no me sacó ni de coña el truco que quiero hacer. Y tengo que volver el día siguiente.
E.P: Yo la virtud que tengo, es que tengo una cara dura que no veas. En el tema deportivo, a la hora de venir y pedir de hacer, no tengo problema. El concejal nuevo ya me conocerá. Puede ser una virtud o puede ser es un defecto. Porque yo decía “ya no me van a dar nada, porque tienen que estar hartas de mí”. La pobre Irene y Blanca decían “¿Otra vez?” y yo “Otra vez”. Y no me importa si es por luchar por los intereses de ellos. Y como defecto, pues que soy demasiado perfeccionista. En el tema de las competiciones, que soy yo la que realmente lo organiza, tengo que medirlo todo al detalle, no se me puede escapar absolutamente nada. Y eso, a veces, ocasiona que sea bastante exigente. Con él también soy bastante exigente con el tema deportivo, él lo puede decir.
Un sueño:
E.P: Me encantaría verlo en un skatepark en una competición internacional.
A.P: Conseguir llegar a la SDS. La SDS, es la competición de Street. Aunque no sea en la fase final, aunque me quedara en las eliminatorias, sería un sueño que he querido conseguir desde pequeño. Con llegar ahí, con el nivel que hay, yo ya me puedo morir feliz.
¿Cómo te has encontrado durante la entrevista?
E.P: Muy cómoda. A mí me ha encantado hablar del skate. Es algo que me gusta mucho. Este último año no le he podido dedicar el tiempo que me hubiese gustado pero este año que entra le vamos a dedicar el doble de tiempo y, entonces, tendrás que hacernos muchas más entrevistas (risas).
A.P: Y yo, como siempre. Que no me sé expresar, pero ya, poco a poco le iré cogiendo confianza con todo esto (risas).
Damos por terminada la entrevista y quedamos en encontrarnos en la pista de skate para hacerles una foto en ese lugar que es tanto para ellos. Estefanía tiene un montón de ideas y muchas ganas con respecto al club de skate, así que algo se hará. Espero que la tercera edición del ‘Battle of Lauro’ de octubre sea todo un éxito y Alhaurín de la Torre se convierta en el lugar que represente a Málaga en el circuito andaluz del skate. ¿Por qué no…?

