(Prensa. JCVM) La XXX edición del Rally de Gibralfaro culminó el pasado sábado por la noche en Alhaurín de la Torre, tras su exitosa presentación del día anterior. El lugar elegido fue la remodelada Plaza de España, que recibió a un gran número de aficionados al mundo del motor. La expectación a lo largo de la doble jornada ha sido máxima y el paso del clásico malagueño de la modalidad ha reportado numerosos beneficios en la hostería de Alhaurín de la Torre, así como a nivel turístico, donde cientos de personas han estado muy activos siempre alrededor de los vehículos. La procedencia de pilotos de diferentes puntos de España (País Vasco, Cataluña, Asturias…) ha provocado la presencia de un gran número de aficionados, además de sus propias familias, que han visitado, conocido y disfrutado el municipio, con la repercusión económica y social que ello conlleva.
En lo puramente deportivo, destacar que la prueba, que ha sido valedera para los Campeonatos de España y de Andalucía, se ha desarrollado por las carreteras de Sierra Morena. Durante la misma, no se han registrado incidencias de consideración, al margen de las averías propias de una prueba de tanta exigencia. De hecho, Mario Pérez, el edil de Turismo y Fiestas del municipio, que participó en la prueba, por ese mismo motivo, tuvo que abandonar en la sexta etapa.
Los asturianos de Pravia Competición, Daniel Alonso y Salvador Belzunces, fueron los vencedores del Rally, al volante y notas de un Sierra Cosworth 4×4, con un tiempo de 1 h.21.52 para cubrir los 122 kilómetros cronometrados. Xavi Domenech y Óscar Sánchez, con el BMW M3 de MC. Sabadell, dominadores en el principio de la carrera, terminaron en segunda posición a 19 segundos, mientras que el tercer puesto fue para Miguel Otegui y Giovanni Breda, con su Porsche Carrera, a 3.32 de los ganadores.
www.alhaurinesdeporte.com


