«Es la primera vez que llego líder al final, así que obviamente voy a ir a darlo todo e intentar conseguir el título». Estas fueron las palabras de Alba Cano a SUR antes de comenzar la cita más importante de la temporada y, probablemente, uno de los días más importantes de su trayectoria deportiva. La joven piloto de 26 años y natural de Alhaurín de la Torre culminó ayer una brillante gesta que comenzó a gestarse ya el pasado mes de junio en el circuito de Cheste, cuando al conseguir dos podios se colocó por primera vez, líder de la clasificación del Campeonato de España de Resistencia, el máximo circuito nacional de la modalidad de vehículos TCR y que logró adjudicarse ayer en el circuito de Barcelona-Catalunya.
En las cuatro campañas que la piloto malagueña llevaba disputando esta competición nunca antes había logrado levantar el título de campeona, corriendo además en solitario en cuatro de las cinco paradas del circuito: Los Arcos, en Navarra; Motorland Aragón, en Alcañiz; Cheste, en Valencia, y el asfalto del Jarama, en Madrid. La de ayer en la ciudad condal fue la encargada de cerrar el calendario de la presente campaña. El hito que ha conseguido Cano adquiere además un punto más de valor al mencionarse que esta en la que compite no es una modalidad femenina, sino mixta. En el Campeonato de España de Resistencia pueden competir en la misma carreras hombres y mujeres y pueden hacerlo además en solitario o por relevos con dos conductores por vehículo, pero a la alhaurina no le hizo falta en la mejor temporada de su historia.
Al menos sucedió así hasta el circuito barcelonés. Normalmente, por parada, se disputan dos carrerras de cincuenta minutos cada una, pero en esta última sólo se realizaba una aunque más larga, de una hora y cincuenta minutos de duración. Esto llevó a Cano y a su equipo, el Monlau-Repsol, a buscar un compañero de batallas para compartir su Cupra TCR y cambio DSG. El elegido fue un hombre de confianza;concretamente, el barcelonés David Cebrián, que pese a su juventud es uno de los nombres de referencia a nivel nacional en el vehículo que utiliza la malagueña. Y, además, ya compitió con él años atrás, cuando todavía se iniciaba en este circuito nacional.
Un año lleno de grandes emociones para Cano, que ayer apenas podía contener la alegría tras proclamarse campeona de España y que, meses antes, decidió abandonar la localidad inglesa de Brighton, donde vivía y trabajaba, para regresar junto a su familia a Alhaurín de la Torre. Una necesaria vuelta a sus raíces para coger el impulso que la ha llevado a conseguir este triunfo. Ahora, a la malagueña sólo le queda descansar antes de comenzar a planificar su próximo año sobre el asfalto.

